Vuelve Grey

Voy a hacer el esfuerzo de escribir dos veces en el mismo día. Creo que la causa lo merece. Todo por Grey. Y es que ahora que cuatro está repitiendo la serie desde el principio tenéis que verla. Es enorme, todo es perfecto: el guión, la estética, el reparto, la banda sonora...

Después de cada ronda de capítulos se queda uno con una sensación extraña, parece que tu vida no es lo suficiente transcendental porque no podrías ser protagonista de una serie como esta. Parece mentira hasta donde han llegado los medios. Creo que tiene mucho que ver con todo el fenómeno de los nuevos famosos de tres al cuarto, de los reality y de todas esas cosas que están asociados. Nos han inculcado que nuestra vida es grande sólo si se refleja en una pantalla, cuando el resto de la gente habla de nosotros, aunque sea mal. ¡MENTIRA! Las cosas que nos pasan en el día a día son grandes porque son nuestras y no hay más. No nos dejemos seducir. Veamos Anatomía de Grey porque es un gran producto comercial, no porque nos gustaría ser como Grey o como House. Ese tipo de personajes, en la vida real, los calificaríamos como una zorra y un hijo de puta, reconozcámoslo.